1969 (Ernst Thompson, 1988)

 

Ralph Carr (Robert Downey Jr,) y Scott (Kieffer Sutherland) son dos amigos que luego de terminar el secundario inician un viaje a dedo por una parte de EEUU en plena guerra de Vietnam. De regreso al pueblo, Scott se encontrará con la partida de su hermano a Vietnam mientras él decide ir a la universidad para no ir a pelear. Esto generará un conflicto con el padre, Cliff (Bruce Dern), un veterano de la Segunda Guerra que está casado con Jessie (Mariette Hartley) pero tiene una ambigua relación con Ev (Joanna Cassidy), una vecina madura pero hippie que toma a Ralph como si fuera hijo suyo y a Cliff como un amante. El conflicto entre Cliff y Scott potenciará una crisis matrimonial entre Cliff y Jessie mientras Scott y la hermana de Ralph, Beth (Wynona Ryder), intentarán salvar a Ralph de ser llevado a Vietnam. Esta ayuda los llevará a violentar una oficina del estado donde Scott y Ralph serán descubiertos y terminarán presos. La detención generará un pequeño revuelo en el pueblo marcharán hasta la fiscalía donde tienen aún detenido a Ralph luego de que el hermano de Scott haya regresado del frente sin vida. 

Algún desprevenido creerá que el año de producción de la película es el mismo del título. Incluso el discurso de Scott en el final no hubiera desentonado por aquél año y hasta llegaría a ser provocativo. Pero la película llega tarde. Supongo que el guión estuvo 20 años sin poder filmarse y cuando lo pudieron hacer no se percataron de que había envejecido. 1969 en 1988 suena a película inútil. Todas las buenas intenciones quedan destruidas por el paso del tiempo; y hasta terminan siendo ridículas (la marcha hacia la Fiscalía para exigir la liberación de Ralph, el conflicto entre Cliff y Scott). Es una rebeldía a destiempo; una rebeldía inocua. Solamente la impresionante presencia de Bruce Dern, que está maravilloso como un padre que tarda en aceptar la locura de Vietnam, logra ser la única atracción de esta película que llegó tarde a la protesta.