Long men fei jia (Tsui Hark, 2011)













La intromisión de los efectos especiales otorgaron libertad de delirio a las escenas de acción y muchas veces este delirio termina por quebrar la verosimilitud y genera más chanzas que adrenalina. Por este motivo, la película de Tsui Hark logra tensión en las resoluciones de situaciones fijas y genera distanciamiento en las de acción.






La historia de Zhao Hua'ian (Jet Li), un justiciero solitario de la época de los emperadores chinos que tropieza con Linq Yanqiu (Xun Zhou) un viejo amor igual de solitaria y justiciera como él, que a su vez se ven envueltos en la búsqueda de un tesoro empieza con una espectacularidad extraña que, aunque siga los lineamientos del género Espadas y brujerías, termina por generar un distanciamiento ante la evidencia de que ambos contrincantes son capaces de cualquier habilidad a la hora de pelear. Este distanciamiento está ausente cuando los protagonistas deban resolver sus cuestiones sin luchar y el movimiento interno de la trama domine el relato y son, sin dudas, lo más atractivo de la película.



También hay una necesidad de construir una escenografía con indudable estética de video juego de la cual el guión, con habilidad, evita contagiarse. Esta escenografía, por momentos, parece ajena a la historia, a excepción de la taberna que bien podría ser un guiño al western, Tal vez, con menos prepotencia tecnológica, el resultado hubiera sido mejor; pero, lamentablemente, el film es un poco desabrido y algo confuso; y eso que los protagonista mantienen durante toda la película una sobriedad digna de los héroes clásicos, pero sin transpirar la camiseta. Y por eso no alcanza. 


Comentarios

Entradas populares