10 items o less (Brad Silberling, 2006)

 














Rarísima película de bajo presupuesto con muchas buenas intenciones. 











Morgan Freeman (haciendo de sí mismo) se propone investigar el mundo de los cajeros de supermercado para su próxima película. Llevado por Packy (Jonah Hill) en una camioneta de reparto hasta una ciudad limítrofe con México, Freeman comienza a interactuar con Scarlet (Paz Vega) una cajera que en su momento tuvo una relación con Bobby (Bobby Cannavale), el encargado del lugar, quien la dejó por su compañera de trabajo Lorraine (Anne Dudek) también cajera pero que por ser la pareja de Bobby se la pasa pintándose las uñas en su línea de caja. Freeman de observador pasará a ser una especie de manual de autoayuda para Scarlet quien la incentivará a encontrar un mejor destino para su vida.




Brad Siberling recurre a una estética  muy diferente a sus películas anteriores como Casper (1996) o City of Angels (1998), lo que hace pensar esta realización como un proyecto personal con la ayuda de amigos (por ahí andan Jim Parsons, Danny DeVito, Rhea Perlman); pero también pareciera ser una velada celebración de Morgan Freeman donde el actor juega un rol de sabio cuando no de oráculo. Esta decisión incomoda porque la película intenta tener una mirada casi documental en sus primeros minutos con la descripción de la rutina del supermercado o la interrelación de sus empleados. Por suerte, esos momentos son mayoría; pero los pocos y extensos parlamentos entre Morgan Freeman y Scarlet, donde el actor parece levitar sobre una nube de sabiduría, ablandan una película que también se propone exponer la imposibilidad de reproducir fielmente la realidad a través de la ficción.



Y al exponer esa imposibilidad, Silberling es efectivo: después de todo Morgan Freeman es un actor exitoso que volverá a su mansión cuando la jornada finalice mientras que el resto de los personajes seguirá con sus vidas rutinarias. Por más que Freeman intente acercarse a ese mundo que le es igual de ajeno que el suyo para el ciudadano común (las escenas en el centro comerical o en el lavadero de autos), no hay posibilidad de interacción entre ambos universos.


Esa lectura es el sostén principal de la película.

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