Este es el romance del Aniceto y la Francisca, de cómo quedó trunco, comenzó la tristeza y unas pocas cosas más (Leonardo Favio, 1967)

Aniceto (Federico Luppi) es un Don Juan de pueblo cuya única posesión de valor que tiene es un gallo de riña ganador en cualquier contienda. Aniceto onquistará a Francisca (Elsa Daniel), una inocente muchacha que trabaja en una casa de familia, quien queda prendada de la seducción del hombre. La pareja pasará sus días en el ranchito de Aniceto, con una rutina amable y cálida, hasta que aparece Lucía (María Vaner) -pura tentación- quien conquista a Aniceto y lo arrastra a perder a Francisca y a vender el gallo para sostener la relación. Finalmente, Lucía desaparecerá detrás de otra conquista y Aniceto queda a la deriva, sin Francisca y sin el gallo que le hacía ganar dinero. Desesperado, Aniceto decide recuperar el gallo robándoselo a quien se lo vendió, sin prevenir el riesgo.

En su segunda película, Favio se vuelve minimalista. Es un cuento rural donde el director conserva la estética de su ópera prima abandonando el tono documental para dejar paso a cierto estilo que puede conectarse con el primer Glauber Rocha pero con profundas raíces argentinas donde tiene mucho peso el encuadre (que va a ser su marca de fuego) y la confianza en los silencios que le dan espesor a la trama.

Al igual que en Crónica de un niño solo (1965), también el entorno juega un papel importante: mientras que en aquella la villa describía la inestable infancia de Polín, en este caso, la zona árida, casi solitaria, donde transcurre la acción realza la desesperación de Francisca por construir una relación estable y la necesidad de Aniceto y Lucía de probarse como seductores.

Por supuesto, nada de esto sería posible sin las impecables actuaciones de Federico Luppi, María Vaner y Elsa Daniel, quienen conforman las aristas de un triángulo amoroso que se destruirá de manera trágica narrada en una toma larga final prodigiosa.

Filmografía de Leonardo Favio hasta Este es el romance del Aniceto y la Francisca, de cómo quedó trunco, comenzó la tristeza y unas pocas cosas más 

1965- Crónica de un niño solo