Nazareno Cruz y el lobo (Leonardo Favio, 1975)

Luego del éxito de Juan Moreira (1973) con sus dos millones y medio de espectadores, Leonardo Favio incursiona en el cine fantástico con el mito del lobizón. 

Nazareno Cruz (Juan José Camero) es el séptimo hijo de un familia llevada adelante por su madre Damiana (Elcira Olivera Garcés) después de que el padre muriera ahogado en el río. Al ser séptimo hijo varón, sobre Nazareno cae la maldición  de convertirse en lobo el día que se enamore. Cuando Nazareno se enamora de Griselda (Marina Magali) aparecerá el Diablo (Alfredo Alcón) para informarle sobre su maldición. Nazareno, como lobo, asesina y será perseguido para matarlo por Julián (Lautaro Murúa), padre de Griselda. Mientras, Griselda -que acepta a Nazareno tal como es- decide protegerlo de la turba que salió a cazarlo. Demasiadas armas y demasiadas cacerías traerán desgracias para todos.

En esta ocasión, Favio se desborda. Y se desborda bastante bien. Aprovecha la excelente melodía de Luis María Serra (que es casi un personaje más en la película) para que el desborde llegue a un lirismo que estalla en imágenes de fuegos, palomas, infiernos y cuerpos entrelazados tanto en el aire como en el agua. Favio no tiene miedo de estirar las tomas y hasta repetirlas (reflejos de El Dependiente) para que la pasión quede bien establecida y así preparar el gran y emotivo final que tiene en la inigualable voz de Alfredo Alcón el toque humano ¿y místico? que eleva la película por encima de cualquier otra que trate el mismo tema. 

Una película dentro del género fantástico donde Favio se mueve con total comodidad sin abandonar su propio estilo y la convierte en una gran realización. 

Filmografía de Leonardo Favio hasta Nazareno Cruz y el lobo

1965- Crónica de un niño solo

1967- El romance del Aniceto y la Francisca, de cómo quedó trunco, comenzó la tristeza y unas pocas cosas más.

1969- El dependiente

1973- Juan Moreira