The Princess and the Frog (Ron Clements & John Musker, 2009)

 

Eudora (Oprah Winfrey) es la costurera preferida de la familia Le Bouff. Al mismo tiempo que trabaja, Eudora entretiene tanto a su hija Tiana (Anika Noni Rose) como a la hija de los Le Bouff, Charlotte (Jennifer Cody) con cuentos de príncipes y princesas. Como se ve desde el principio, Tiana no cree en los príncipes en los que sí cree Charlotte y esa actitud la mantendrá con los años. El tiempo pasará, Tiana quedará huérfana y trabajará en una cafetería donde junta dinero para poder armar un local nocturno. En tanto, la llegada de Naveen (Bruno Campos) -un príncipe venido a menos en busca de casarse con una princesa para que sus padres le hereden el trono- alterará a las chicas del lugar entre las que se encuentra Charlotte. Durante una fiesta en honor al principe, Tiana llega a la fiesta tras Charlotte y es confundida por Naveen por una princesa. Sin embargo, el hechizo del Dr. Facilier (Ketih David) covertirá al ayudante del príncipe en el princípe mismo y al príncipe Naveen en un sapo. Al creer Naveen que Tiana podrá hacerle recuperar su apariencia, le pide que lo bese confundiéndola con una princesa. Pero al besarlo Tiana, ella se convierte en rana. El resto de la película es el viaje de ambos a través de los pantanos tras Mama Oddie (Jennifer Lewis), una bruja que se supone romperá el hechizo.

 

El grave problema que tiene la pelicula es que la historia no pasa de esa anecdóta; tras el planteamiento, la trama se va rellenando con canciones que se amontonan casi ininterrumpidamente. Esto no sería problema si la película hubiera sido pensada como un musical. Pero no es así: las canciones no solo interrumpen la fluidez del relato sino que tampoco sirven para agregar valor dramático a la historia. Incluso el Dr. Felicier -un personaje que pudo haber sido más interesante- no tiene mayor relevancia e incluso su final es indigno para cualquier villano.

Tampoco en lo visual la película descolla. Más allá que en los pasajes en el pantano tiende a buscar una poesía que no llega a conmover. Supongo que retratar la Nueva Orleans de los años '50, muy emparentada con Tennesse Williams (de hecho, hay un gag que explicita esa relación), y con locales nocturnos estilo Cotton Club, podía resultar inconveniente al tono familiar de Disney y por lo tanto necesitaron restar todo lo posible la vitalidad de la cultura negra.

El resultado es una película que pudo haber sido más de lo que terminó siendo. Ni siquiera tiene un despliegue visual necesario para salvarla de la indiferencia.

Filmografía de Ron Clements hasta The Princess and the Frog

1986-The Great Mouse detective

1989-The Little Mermaid

1992-Aladdin

1997-Hercules

2002-Treasure Planet

2007-Kuriocity

Filmografía de John Musker hasta The Princess and the Frog

1986-The Great Mouse detective

1989-The Little Mermaid

1992-Aladdin

1997-Hercules

2002-Treasure Planet