Sólo por hoy (Ariel Rotter, 2001)




Equis (Mariano Martínez), Toto (Damian Dreizik), Morón (Federico Esquerro)  y Aili (Aili Chen) alquilan un departamento al que sumará Fer (Sergio Boris), hermano de Morón, que sobrevive como pintor de brocha gorda de un único cliente, Dennis (Carlos Kaspar), amigo del padre. Equis aspira ser cocinero, Toto actor, Morón director de cine documental y Aili pintora. Las frustraciones y lo inalcanzable de los objetivos serán los ejes por donde girará la película mientras sus protagonistas sobreviven (no tan duramente) a los vaivenes diarios.



La película de Rotter mantiene el interés tanto por el carisma de los personajes (todos los intérpretes están muy bien), el tono intimista y una ajustada mirada sobre lo cotidiano, como por su inoxidable estética posmoderna -que roza lo publicitario- acompañada por la música ad-hoc de Gustavo Cerati. La intención de que la película luzca cool, sin tener ningún anclaje local o temporal, le juega a favor a la hora de una revisión o de captar futuros espectadores ya que le impide envejecer a la historia como a  sus personajes.



Sin embargo, esa pureza o ausencia de contaminación -tanto en la estética como desde el guión (algo que se nota sobre todo en los segmentos en el restaurante donde trabaja Equis)- evita redondear una opera prima que queda como un producto correcto, ligero, pero que podría haber dado para más si hubiera dejado que los personajes transpiren la camiseta.




















Avance cinematográfico








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