Je vous salue, Marie (Jean Luc Godard, 1985)
María (Myriem Roussel) y José (Thierry Rode) es una pareja que se encuentran con Gabriel (Philippe Lacoste) y una niñita (Manon Anderson) que recién bajaron del avión. Gabriel le dice a María : "Yo te saludo, Maria" y María queda embarazada ante la incredulidad y desconfianza de José, que supone que la engaña. En tanto, Adán (Johan Leysen) y Eva (Anne Gautier), un profesor y su alumna, van y vienen en una relación con mucho sexo y oscuridad, que no queda en nada.
Godard parece ser blasfemo pero termina admitiendo que la religión es una cuestión de fe. Detrás del estilo Godard se adivina una comedia un tanto herética que lentamente se vuelve religiosa a medida que María acepta su embarazo, lo defiende y lo padece. Pero la verdadera transformación es la de José, que pasa de la negación a la resignación y acepta al niño -Jesús (Malachi Jara Kohan)- quien pronto se le rebela a los padres.
Más allá de las clásicas reflexiones literarias -que eran marca en el Godard de los 80-, están las imágenes que van de la belleza del mundo hasta las provocadoras pasando por estampitas como cuando José le toca el vientre a María y ella queda congelada en una expresión entre la sorpresa y la iluminación. Pero, como dije más arriba, Godard termina por aceptar la religión desde su comedia blasfema con un remate tan respetuoso como irreverente con Gabriel saludando a otra María y fon los eróticos labios entreabiertos de María cerrando la película.
No será la mejor de Godard, pero en los ochenta Godard estaba más allá de cualquier calificación. Su cine elude las calificaciones fáciles.
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