Nelly & Monsieur Arnaud (Claude Sautet, 1995)

Nelly (Emmanuelle Beart) acaba de perder el trabajo en una panadería y tiene un novio, Jerome (Charles Berling), que hace poco y nada por su vida, por la de Nelly y por la pareja. Fortuitamente, y por intermedio de Lucie (Francoise Brion) -una amiga en común- Nelly conoce a Pierre Arnaud (Michel Serrault), un juez correcto  e impoluto que está escribiendo sus memorias y necesita que alguien transcriba sus manuscritos a una computadora. Arnaud le propone que haga el trabajo por una buena paga y Nelly acepta. Así comenzará entre ellos una relación subterránea que afectará la pareja de Nelly con Jerome, interferirá en un incipiente interés de Vincent (Jean-Hughles Anglade) por Nelly  y demostrará una faceta menos amable del juez.

Claude Sautet (1924-2000) -que venía de una gran  película como Un coeur en hiver (1992)- construye una especie de apéndice de aquella con el mismo tono cerebral pero que esta vez funciona por partes. Esto no quiere decir que Nelly & Monsieur Arnaud  sea una película fallida, sino que es una película que no necesitaba de tanta frialdad porque Mr. Arnaud no es gélido como sí lo era el personaje de Daniel Auteil de Un coeur en hiver. 

Esto se nota en el mejor momentos de la película donde Arnaud espía a Nelly durmiendo desnuda. Este momento es perturbador hasta que Nelly despierta para alentar a Arnaud a que se anime a tocarla. El despertar de Nelly y su ansia es pasión pero la mirada fría de una película donde las emociones quedan en segundo plano anulan el quiebre de ese momento que es el más importante de la película.

Sin embargo, Nelly & Monsieur Arnaud es un film atendible, donde el oficio de Claude Sautet y las magníficas interpretaciones de Michel Serrault y Emmanuelle Beart brillan a pesar de estas puntos flojos.